Para todo groomer no es un secreto que lograr que un perro esté tranquilo y cómodo durante un proceso de aseo y belleza profesional, es extremadamente importante para lograr el resultado esperado y preciso. Así que, en Gabrica como expertos en el tema, a continuación le daremos algunos consejos para mantener la calma de un perro en el proceso de grooming,
Un pet grooming es un lugar nuevo y extraño lleno de ruidos y equipos, sobre todo para los perros que antes no hayan visitado peluqueros profesionales, por lo que puede que no estén familiarizados con este entorno, y desencadene en ellos un comportamiento ansioso.
Por lo que asegurarse de que el perro se sienta cómodo en su entorno, es vital para crear una sesión de aseo profesional eficaz y productiva.
Si desea que el resultado final sea lo más impecable y sorprendente posible, es importante satisfacer las necesidades y los requisitos del perro durante el proceso de preparación.
Asegurarse de mantener la calma de un perro y lograr que su cliente se sienta seguro en sus manos, es la única manera de construir una relación de confianza con él.
El proceso de grooming puede ser estresante y preocupante para los perros, por lo que hacer que se sientan cómodos es la única forma de ayudarlos a sentirse tranquilos y listos para ser cuidados profesionalmente.
Así que, en primer lugar es de vital importancia que anime al perro a explorar el equipo por sí mismo, luego permita que lo huela y haga contacto con él, para que toda la experiencia sea positiva.
Los perros tranquilos y felices son los mejores perros para un proceso de grooming, por lo que es importante dar pequeños pasos cuando se presenta por primera vez a un perro a una sesión de belleza y aseo para futuras ocasiones.
El miedo a lo desconocido puede disuadir a las personas de probar nuevas experiencias, lo que no es diferente para los perros.
Para mantener la calma de un perro y que el aseo sea fácil y placentero, cree un entorno familiar en el que el perro sienta que tiene el control.
Comience por dejar que olfatee el equipo que planea usar y pruébelo con el perro de antemano para que no sea una sorpresa desagradable.
Encienda y apague los equipos para permitir que el perro se acostumbre al ruido, luego comience frotándolos de lado a lado para que se acostumbre a la sensación de las vibraciones e imite la acción del acicalador.
Al cepillar, puede aplicar este mismo proceso, pasando las cerdas por el lomo del perro sin penetrar en el pelaje para preparar al perro para lo que está por venir.
Si es una de sus primeras veces en el pet grooming, tómelo a su ritmo. Después de todo, ¡el cliente siempre tiene la razón!
Si tiene un perro que está particularmente nervioso con el equipo de aseo profesional o no lleva bien toda la experiencia, las golosinas son una forma ideal de recompensarlo por permitirle realizar su rutina de aseo y belleza.
Cuando se quede quieto y le permita maniobrar como necesite, recompénselo con elogios verbales y una caricia. El perro comenzará a relacionar el hecho de mantener la calma con recompensas por un aseo más relajado.
Para los perros nerviosos, pida permiso al propietario para darles golosinas de comida para fomentar la continuación de un comportamiento bueno y obediente. Con el tiempo, el aseo se convertirá en una experiencia mucho menos dura para el perro.
Recompense al perro solo cuando esté tranquilo y quieto y, a medida que el perro se acostumbre al proceso, prolongue el tiempo entre golosinas y siga premiando su comportamiento.
Si el proceso de grooming se vuelve demasiado para el perro, es importante reconocer este comportamiento y dejar de hacerlo.
Esto es importante cuando se trata de ganarse la confianza de un perro, ya que ellos necesitan saber que el cepillado se detendrá cuando no se sientan cómodos.
Al introducir gradualmente el proceso de preparación del perro, los descansos se vuelven menos frecuentes y eventualmente no serán necesarios.
Por ello, es fundamental que recomiende al dueño de la mascota cepillar poco y a menudo a su perro, para generar confianza y solo extender las sesiones de cepillado cuando el perro esté completamente relajado.
Además de tomar descansos, es importante reconocer cuándo las cosas se vuelven demasiado para el perro.
Si el perro que está en el proceso de grooming se aleja, o se pone inquieto o angustiado, es hora de reconocer este lenguaje corporal y dejar de asearlo.
Continuar forzando el proceso solo causará más frustración y potencialmente anulará todo el tiempo que dedicó a ayudar al perro a mantener la calma.
Si está realizando el proceso de grooming a un perro nervioso o inquieto, pídale a sus dueños algo familiar para ayudarlo a calmarse.
Ya sea la música que escucha en casa o una manta o juguete que le guste mucho, ya que esto puede ayudar al perro a relajarse y distraerlo de situaciones estresantes.
Por otro lado, existen playlist de música relajante para perros, que son muy útiles durante estos procesos.
Recuerde que la calidad de los productos que use deben ser exclusivamente para mascotas, y al ser el indicado, ayudará a mantener la calma del perro que este atendiendo. Es recomendable el uso de productos seguros para las mascotas como la línea profesional para groomers de Hydra.
Para asegurarse de tener siempre algo a mano para ayudar a calmar las situaciones estresantes, es recomendado el uso de esencias florales de BACH o el difusor de feromonas apaciguadoras caninas de ADAPTIL.
Estos productos son ideales para mantener la calma de un perro en situaciones que por lo general podrían causarle estrés, como la visita a un pet grooming.
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