Decirle adiós a tu mascota nunca será una tarea fácil: recordar todos aquellos momentos que compartiste junto a ella, las risas, los pelitos, los besitos y accidentes, todas esas anécdotas marcan el corazón de los padres de mascotas. Sin embargo, con la muerte llega la vida y tu mascota, después de su paso por este plano terrenal, puede seguir generando vida ¿Cómo? Una tendencia ha ido tomando espacio poco a poco: el compostaje de mascotas. Esta práctica, que es una alternativa frente a la cremación e inhumación de mascotas, resulta ser bastante amigable con el medio ambiente. En Gabrica, como expertos en mascotas, te contamos en qué consiste este proceso y cómo los restos de mascotas pueden generar vida a árboles, plantas o arbustos.
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El compostaje como tal es la transformación de materia biológica en materia orgánica libre de patógenos, pero cuando hablamos de compostaje de mascotas, consiste en dar una visión alterna frente a la muerte. Cuando un ser querido o animal fallece, se opta por el entierro o cremación para disponer de los restos; sin embargo, el compostaje no ve los restos como algo de lo que hay que disponer, sino que observa a los restos como “una fuente de nutrientes para alimentar un nuevo ciclo de vida”. Y esto no es una práctica reciente.
Durante varios años, granjeros en Europa y Estados Unidos, para reducir costos de eliminación, fabricaban abono con el ganado que moría, enterrándolo en grandes montones de madera o tierra durante semanas mientras se descomponían los restos. No obstante, el compostaje de mascotas sí es una actividad muy reciente, y más en Colombia.
En Colombia, las mascotas muertas son enterradas en pilas rectangulares llenas de tierra y viruta de madera. Para acelerar el proceso de descomposición, se rocía un líquido (que contiene bacterias) a los restos de los animales. El lugar también debe cumplir con determinadas condiciones de clima y suelo para que se lleve con éxito el proceso de compostaje.
Para que te hagas una idea, un perro o gato pueden tardar hasta 2 meses en convertirse en abono.
La cremación y entierro de cadáveres impacta negativamente al medio ambiente. Para incinerar un cuerpo se necesitan combustibles fósiles, los cuales cuando son quemados, emiten carbono a la atmósfera. Por el lado del entierro, se ha comprobado que los entierros humanos pueden contaminar el agua subterránea.
En cambio, el compostaje de mascotas es un proceso que no contamina y da vida. En Colombia, se integra la biotecnología e innovación para disponer del cuerpo de una mascota de forma respetuosa y natural; el compostaje de mascotas contribuye en la preservación de los ciclos dinámicos que la naturaleza viene realizando desde siempre.
El compostaje de mascotas también cambia la forma en que vivimos y percibimos la muerte de nuestras mascotas: “Transforma un hasta luego en un por siempre”. La muerte de nuestros compañeros de vida ya no se resume en visitarlos en un cementerio o tenerlos en una vasija, sino en generar vida de árboles, arbustos y plantas que luego podremos visitar en lugares dispuestos para eso.
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