La nutrición es la base fundamental en todas las etapas de vida para perros y gatos: de cachorros, les ayudará a tener un correcto desarrollo y crecimiento; de adultos, les ayudará a tener un sistema inmune activo para estar vitales; en su vejez, aportará los nutrientes necesarios para proteger su corazón, peso, sistema urinario y osteoarticular.
Según cada etapa de vida, varían los requerimientos nutricionales de tu mascota; por eso, es muy importante darle un alimento concentrado balanceado que le proporcionará los nutrientes que ella necesita mientras sea cachorra, adulta o mayor.
En la actualidad, encontramos diferentes tipos de alimentos para mascotas: algunos son de baja calidad y otros de alta calidad. Los últimos, tienen ingredientes de primera que le proporcionan múltiples beneficios a tu perro o gato, pero ¿Por qué? A estas comidas se les adiciona ciertos suplementos para mejorar la disponibilidad y absorción de los nutrientes en el tracto digestivo; además, también mejoran el microbioma intestinal, una comunidad de microorganismos, que se encarga de la absorción de nutrientes. (Molina, 2018).
Sabemos la importancia de la nutrición para tu mascota y cómo por medio de esta cuidas su salud digestiva, ¡y no solo eso! Con una buena dieta, estás evitando molestias digestivas tales como vómitos, diarreas, inapetencia o falta de apetito. (Gabrica)
Las alteraciones del tracto digestivo pueden darse por diferentes causas, entre ellas tenemos los desequilibrios de la microbiota intestinal o también conocida como disbiosis. Pueden ser causadas por cambios alimentarios, alimentos de baja calidad, proteínas con poca digestibilidad, tratamientos prologados con antibióticos, entre otros.
De la misma manera, los gatos también se ven afectados por estos desbalances, pero el estrés en ellos suele ser un detonante. Si ves que tu gato está presentando un acicalamiento excesivo, podrás evidenciar que este lamido hará que ingiera una gran cantidad de pelo. Así que es importante que reconozcas las causas de su estrés. Pueden deberse a: mudanzas, cambios de muebles o un nuevo integrante de la familia, hasta una nueva mascota o persona en la familia. (Castillo, 2023)
Si como padre de mascota te sigues preguntando por qué es tan fundamental el sistema digestivo de tu peludo, en Gabrica te contamos que este sistema evita el ingreso de agentes patógenos que pueden desarrollar enfermedades en tu mascota; por esa razón, se le considera una barrera inmunológica. En él encontramos un gran número de microorganismos, y no por nada se le conoce como uno de los órganos más grandes del cuerpo. (Dongonatura, 2018)
Las dietas de las mascotas tienen una relación directa con la variedad de los microorganismos (como bacterias, hongos, virus y protozoos) que forman el microbioma intestinal. Este ecosistema intestinal también se encarga de contribuir en el correcto funcionamiento del tracto digestivo e inmunológico de los perros y gatos. Así que si se llega a presentar un desbalance en él, afectaría la salud e integridad de las mascotas. (Castillo, 2023)
La formación del microbioma intestinal se inicia en el parto; después, la transmisión de los microorganismos se da a través de la alimentación de la cría por medio de la leche en la lactancia. Cuando culmina la etapa de lactancia, empieza una nueva etapa en la vida de la mascota y esos cambios influirán en su microbiota intestinal. Seguirá fortaleciéndose hasta lograr un equilibrio en la etapa de adulto. De ahí en adelante, esta puede alterarse, en primer lugar, por la dieta y en segundo lugar, por la edad. (Dongonatura, 2018)
Los microorganismos que cubren el tracto digestivo evitan que agentes patógenos se fijen a las paredes de este órgano; adicionalmente, producen sustancias químicas que eliminan algunos de estos patógenos tales como parvovirus, moquillo, coronavirus u hongos que puedan ocasionar reacciones alérgicas, bacterias como E coli y salmonela. Cabe recordar la importancia de la vacunación para la prevención de alguno de estos agentes y que esta protección que realiza el microbioma intestinal no reemplazará la protección vacunal.
Otra función protectora que brinda el microbioma intestinal es evitar que toxinas o alérgenos penetren con facilidad y causen daño en el organismo de tu perro o gato, ayudando en su eliminación a través de su tracto digestivo.
Estos microorganismos producen unas sustancias llamadas ácidos grasos de cadena corta que proporcionan energía a los enterocitos (células que se encuentran en el tracto digestivo); por otro lado, aportan energía para el organismo de las mascotas. Esto le dará paso a una mejor nutrición, ya que se mejora la absorción de nutrientes y se reducen los desechos (heces). Y por si no es suficiente, también ayudan a metabolizar proteínas y carbohidratos, producir vitaminas como k y el grupo del complejo b y también regulan el crecimiento y ph favoreciendo así la absorción de estos nutrientes.
Aquí aplica el dicho “barriga llena, corazón contento”. Se da porque existe una comunicación entre el cerebro y el intestino: el cerebro enviará mensajes al microbioma intestinal tales como tengo hambre, sentirse saciado o lleno.
El intestino tiene millones de terminaciones nerviosas y en él se produce el 95% de la serotonina. Él es un mensajero químico que regula la emociones y el 50% de la dopamina, que es un mensajero químico que está relacionado con el aprendizaje, memoria y sensaciones placenteras; por eso, nuestro intestino puede influir en nuestras emociones.
Nuestros perros y gatos están expuestos a diversas emociones como estrés, miedo, ansiedad, angustia, tristeza, agresividad, alegría, etc., las cuales también pueden afectar físicamente a las mascotas, produciendo algunos signos como vómitos, diarreas y convulsiones. No es un mito decir que el entorno puede afectar la salud de nuestros peludos. Es primordial que cuando haya algún conflicto en la familia como divorcios, fallecimientos, separaciones, debamos estar atentos.
Si tu perro o gato presenta algún signo de enfermedad, no olvides consultar a tu médico veterinario y así poder ayudarlo. (foyel)
Para terminar, en el mercado encontramos diversos alimentos, de varias categorías y de diversas presentaciones. Debes ser cuidadoso con la elección de la dieta correcta para tu perro o gato, ya que como vimos a lo largo de este artículo, el cuidado intestinal es muy importante para tener una mascota sana y saludable.
Debemos tener presente al momento de la elección:
Otros cuidados que podemos tener en cuenta para la salud intestinal son cuidar las emociones a las que están expuestos nuestros perros y gatos; uso de antibióticos responsablemente bajo las indicaciones del médico veterinario en cuanto a duración del tratamiento y dosificaciones para evitar resistencias; y suplementar con prebióticos y probióticos para ayudar a restaurar el microbioma intestinal.
Bibliografía
Castillo, D. (2023). La nutrición biótica para mantener el bienestar y la salud de las mascotas. petfood.
Dongonatura. (2018). Microbiota: La flora intestinal en perros y gatos. Dongonatura.
foyel, m. (s.f.). El organo externo de somatizacion desde la Homeopatia Veterinaria. María Carolina González Gómez.
Gabrica. (s.f.). NUTRICIÓN EN LAS MASCOTAS: LA DIGESTIBILIDAD Y LA IMPORTANCIA DE LOS PROBIÓTICOS.
Molina, A. (2018). Probióticos y su mecanismo de acción en alimentación animal. Agronomía Mesoamericana.
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