¿Eres un amante de los perros? Si estas en Colombia, seguramente has escuchado la frase “el perro es el mejor amigo del hombre”, pero te has preguntado en ¿Cómo ser el mejor amigo de tu perro? En Gabrica, como expertos en mascotas, te daremos a continuación 10 consejos para tener un vínculo fuerte con tu peludo ¡Síguelos al pie de la letra!
Por qué el vínculo entre un perro y una persona es tan fuerte
El vínculo entre un humano y un perro es antiguo. De hecho, durante miles de años los perros fueron criados para la caza, el pastoreo, la protección y el compañerismo, lo que a su vez, ha llevado a la lealtad, la amistad y el apoyo emocional, beneficiando tanto las personas, como a los perros.
Cómo convertirte en el mejor amigo de tu perro
Si quieres convertirte en el mejor amigo de tu perro y construir un vínculo de por vida, es mejor comenzar tan pronto le des la bienvenida a casa.
¡Las primeras impresiones cuentan! Para comenzar bien, asegúrate de tener todos los recursos adecuados para la llegada de tu nuevo amigo, dentro de ellos debes tener:
Una cama cómoda.
Platos para la comida y bebida.
Juguetes divertidos.
Su comida favorita.
Si vas a traer un perro a casa, tener una manta o algo que huela a su madre también puede ayudarlo a instalarse en su nuevo hogar, y fomentar una nueva y próspera relación contigo.
A continuación te daremos 10 consejos para desarrollar una conexión fuerte con tu mascota.
¡Hazle saber a tu cachorro las reglas! Por ejemplo, no lo dejes dormir en tu cama si es probable que cambies de opinión cuando crezca y ocupe demasiado espacio.
Mantén una rutina tanto como te sea posible:El juego, la comida y los paseos deben realizarse, siempre que sea posible, a la misma hora todos los días. Aunque los perros no pueden saber la hora exacta, sí saben cuándo cambia una rutina, y puede molestarlos.
Sé coherente en tus mensajes: Asegúrate de que todos los demás en la casa sigan las mismas reglas.
Dale mucho amor: ¡Esto es lo más fácil! Da mucho amor y recibirás mucho más a cambio.
Otras reglas generales para perros incluyen:
Entrenamiento desde una edad temprana: Empieza con lo básico (por ejemplo, siéntate, ven, aquí, espera, etc.) y luego desarrolla este tipo de actividad al siguiente nivel enseñando trucos. Algunas razas de perros, como Border Collies y Spaniels son muy enérgicas, inteligentes y les encanta complacer a sus dueños. En un abrir y cerrar de ojos ¡Podrían estar haciendo trucos como saltar por un arco o correr por túneles!
Pasa tiempo con tu perro: sentarse juntos en el sofá, pasear, jugar, cepillar o incluso darle un masaje (si le gusta que lo toquen) te permitirá desarrollar un vínculo más fuerte y convertirte en el mejor amigo de tu perro.
Ayúdalo a socializar: Es importante que tu perro se sienta cómodo en muchas situaciones diferentes, especialmente si es un cachorro y todavía está aprendiendo. Llevar a tu perro a clases de socialización lo ayudará a acostumbrarse a otros perros y sonidos, y además, así sabrá que tú siempre estarás allí para ayudarlo durante esta etapa de desarrollo y fortalecerá aún más su vínculo.
Jugar: ¿A qué perro no le gusta jugar? Ya sea que vaya a buscar, atrapar, jalar o jugar al escondite, divertirse con tu perro es genial y un buen ejercicio para él también.
Prueba algo nuevo: Si bien los perros disfrutan de la rutina, no significa que no prueben otros lugares para caminar (que tendrán olores diferentes para que tu perro los investigue) o que incluso prueben una nueva actividad como una clase de agilidad para que aprenda nuevos trucos.
Aprende el idioma de tu perro: Los perros no hablan, pero pueden avisarte cuando quieren algo, si es la hora de cenar o si aún no has sacado a tu perro a pasear. Cuando conozcas bien a tu perro, también podrás saber cómo se siente: hambriento, feliz, con ganas de jugar o un poco deprimido. Recuerda que ser el mejor amigo de tu perro, te permitirá reconocer su lenguaje y tomar las medidas necesarias frente a lo que necesite.
¡A los perros les encanta dar y recibir! Si bien puedes ser el mejor amigo de tu perro, él también debe vincularse con otros miembros de la familia. Para esto, deja que se involucren a la hora de comer, pasear o cepillarse los dientes, así, ellos también podrán sentir todo el amor que tu perro tiene para dar.
Recompensa a tu perro por entrenar: Elogia siempre a tu perro cuando haga lo que le pides, y no tengas miedo de darle un premio para recompensarlo; rápidamente aprenderá que cuando obedece, obtiene algo bueno a cambio.
¡Nunca lo castigues ni seas agresivo para corregirlo! No desarrollarás un vínculo fuerte con tu perro si le gritas y lo castigas. Esto hará que se sienta temeroso, confundido y estresado. En cambio, trabaja con tu perro para enseñarle cuál es el comportamiento apropiado. Intenta usar una orden que hayas usado en el entrenamiento y que tu perro ya conozca, cómo “sentarse” o “quedarse quieto”, lo que lo alentará a hacer algo más que el comportamiento no deseado, ¡y lo ayudará a adaptarse de manera positiva!
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